Ser propietario de una propiedad implica adquirir responsabilidades, como el pago de servicios como agua, luz y predial, siendo este último uno de los más importantes.
El predial es un impuesto anual que los gobiernos municipales, como la Secretaría de Administración y Finanzas de la Ciudad de México, recaudan y utilizan para mejorar instalaciones públicas, obras urbanas y servicios públicos.
Para calcular el monto del predial, se toman en cuenta factores como el tipo de inmueble, la superficie, la construcción y la edad del mismo, los cuales se evalúan al hacer el avalúo catastral.
En caso de vender la propiedad, es recomendable cambiar el titular del predial para que el nuevo dueño asuma esta responsabilidad.
Los requisitos para hacer este cambio incluyen tener la Escritura Pública inscrita ante el Registro Público de la Propiedad y del Comercio de la CDMX, una identificación oficial vigente, la última boleta predial pagada y, en caso de actuar en nombre de otra persona, un Poder Notarial o Carta Poder simple firmada por el otorgante, apoderado y dos testigos acompañada de credenciales oficiales de todos los involucrados.
Además, si se cuenta con un Contrato Privado de Compra-Venta, Cesión de Derechos, Sentencia Judicial con acuerdo de cause de ejecutoria, entre otros, deberá estar inscrito ante el Registro Público de la Propiedad y del Comercio de la CDMX.
El interesado o su representante legal deben firmar la petición y dar seguimiento al trámite hasta que se concluya.